sábado, 28 de octubre de 2017

Té, colores de otoño

Té japonés.
El otoño brinda una paleta de colores entre los cuales predominan algunos que nos recuerdan los del té. Podemos hacer una pausa a media mañana o a media tarde para tomar una taza y reencontrarnos con nuestro sentido del placer, aliviándonos del tráfago del día. 
Negro o verde, caliente o tibio, el té siempre reconforta.

El té tiene color de otoño y el otoño y sus colores aumentan el placer de tomarlo.

jueves, 26 de octubre de 2017

Pequeñas cosas

Te sorprenderás, como siempre,
ante pequeñas cosas,
cosas que no son difíciles de ver,
aunque solo admiren a personas que descubren universos 
cada vez que abren los ojos.

La vida cambia a cada instante.
Como tú.

domingo, 22 de octubre de 2017

Triste miel de otoño

Tus ojos son otoño: luz triste y hermosa.
Si te miro y logro que me mires,
tus pupilas me regalan destellos de miel
que endulzan el declive de la tarde.

En tu mirada lucen hojas doradas,
hojas maduras que caen gozando su belleza.
En tus ojos hay también una albura de lágrimas,
espejo de las mías.
Lágrimas hechas de amor y de nostalgia 
de algo que aún no hemos perdido.

En el blanco de tus ojos se deslizan quimeras y temores
y las sombras de la vida danzan, danzan
avisando de una fría e inminente media luna.

Hará frío esta noche. En la penumbra, empero,
intercambiaremos nuestros mantos de tristeza,
tan parecidos, pero tan distintos,
para sentirnos a cobijo de la muerte.

Mañana despertaremos bajo nubes de melocotón
y advertiremos, al verlas y al mirarnos,
que aún no es invierno. Que aún no es invierno.

Jordi Rueda

viernes, 20 de octubre de 2017

Se doran las hojas

Otoño. 
Se doran las hojas de los árboles. Reverberan.
. El placer visual es extraordinario.

jueves, 19 de octubre de 2017

Co-quí, co-quí

Los coquíes vuelven a cantar en las noches de Puerto Rico. Los huracanes acabaron con miles de ellos, pero el canto de los supervivientes vuelve a ser un signo de esperanza en una isla completamente devastada. Co-quí, co-quí…

lunes, 16 de octubre de 2017

El desorden vital

Cuando se aproxima, otoño tras otoño, al día en que celebramos a los muertos, el de Todos los Santos, echas la vista atrás y te das cuenta de que casi siempre has bebido vino de la misma bodega, de que te has acostado con la misma mujer casi todas las noches, de que has creído en un único dios y de que has sido ciudadano de un solo país.

Tratas de figurarte, entonces, que tienes 25 años, que cambias a menudo de vino, que eres infiel, que apostatas y que te largas a otra parte, sin rumbo. Cavilas que si hubieras hecho todo eso hubieras sido feliz. Pero en realidad, a los 25,  te aficionaste a un solo vino, te echaste una novia con la que, al poco, te desposaste, dejaste las prácticas religiosas pero sin descreer del llamado dios y tus viajes fueron solo turísticos, rebañegos. Y así has pasado otros 25 años.


Cuando se aproxima, cada otoño, el Día de Todos los Santos, te das cuenta de que aun tienes que empezar a vivir de verdad. Necesitas degustar el caos antes de que sea demasiado tarde… pero qué tremenda flojera te entra cuando lo imaginas. Tal vez… tal vez cuando llegue la primavera.


El caos promete vida y aventura, pero hay que tener arrestos para adentrarse en él.

viernes, 13 de octubre de 2017

Espejismo

Las nubes descansan sobre los rascacielos. 

Lentamente oscurece. 

Muchas ventanas se iluminan.

Las farolas, abajo, también.


En el crepúsculo urbano

entre los edificios sombríos, 

irrumpe un espejismo: 

tú.

 

Siempre fuiste un espejismo.

Como ahora.

miércoles, 11 de octubre de 2017

96




¿Recuerdas, querida, aquellas tardes de verano?
Las pasábamos juntos, nos mirábamos a los ojos, de cerca o a media distancia.
Tomábamos té caliente para combatir el calor.
Después nos echábamos en la cama y nos abrazábamos hasta sudar el té.
Otras veces templábamos o nos recostábamos el uno en el otro. Cambiábamos las posturas… era muy agradable.

No he vivido momentos más dulces en toda mi vida como los que compartí contigo en aquellas tardes de verano del 96 en que mi cabeza descansaba a ratos sobre la almohadita velluda de tu pubis. Suave.
Pero ha pasado el tiempo y ahora ya no es lo mismo. Te afeitas… y tu pubis pincha.

                                                                                                                           
                                                                                                                 Jordi Rueda                                                                                     

sábado, 7 de octubre de 2017

Volveremos a vernos

En tu mirada de miel
hay dos soles pequeños, 
cada vez más pequeños,
Son compañeros del ocaso
pero aún despiden
pequeñísimos destellos de luz finita.
Poco a poco, empero,
se visten de penumbra,
y ocultan su dulzura.

Tus ojos se convierten en ausencia,
los míos en olvido.

No estamos hechos, ahora,
el uno para el otro.

Quizá una noche,
vacíos de recuerdos,
con un poco de neón en las pupilas,
volveremos a encontrar el deseo que nos debemos
en ti o en mi, en él o en ella.

En algún rincón de los ojos
de personas sin pasado,
como nosotros,
volveremos a vernos.

martes, 3 de octubre de 2017

Andar. Mirar. Saber. Gozar. Pasar.

Andar. Mirar. Ver. Conocer. Saber. Pasar.
                      Gozar.
Ver. Conocer. Saber. Gozar 
                     ¿Pasar?
Ver
Conocer
Saber
Gozar
Pasar
Olvidar.

Ver. Mirar. Imaginar. Parar. Seguir.

Recordar
Mirar
¿Gozar?
Seguir
Andar
Parar
Descansar. Soñar.

Ir ¿Ir?
Andar
Morir ¿Morir?
Morir.

Nacer. Andar. Mirar. Ver. Conocer. ¿Comprender?
                       Saber.
Andar. Mirar. Cantar. Aprender.
                       Decir.
Callar. Andar. Mirar. Ver. Sorprenderse. Sonreír. Parar. Seguir. Morir. Nacer.
                           
                       Vivir.
                       Decir.

                     Jordi Rueda

lunes, 2 de octubre de 2017

Escúchate

Es


cha
me
¡Es
cha
te!
Siénte
te
Aprén
de 
te 
¡víve
te!
¡Vive!
¡Vive!
¡Vive!

Jordi Rueda