jueves, 17 de octubre de 2019

Tus ojos son otoño

Tus ojos son otoño: luz melancólica y hermosa.
Si te miro y logro que me mires
tus pupilas me regalan destellos de miel
que endulzan el declive de la tarde.

En tus ojos grandes caben mil hojas doradas,
hojas maduras que caen exhibiendo su belleza.
En tus ojos hay también una albura de lágrimas,
espejo de las mías.
Lágrimas hechas de antiguo amor y de nostalgia 
por algo que aún no hemos perdido.

En el blanco de tus ojos se deslizan quimeras y temores
y las sombras de la vida danzan, 
danzan avisando de una fría e inminente media luna.

Hará frío esta noche. En la penumbra, empero,
intercambiaremos nuestros mantos de tristeza,
tan parecidos, pero tan distintos,
para sentirnos a cobijo de la muerte.

Mañana despertaremos bajo nubes color melocotón
y advertiremos, al verlas y al mirarnos,
que aún no es invierno.